PICSI, Inyección fisiológica de espermatozoides

En el ICSI tradicional la selección del espermatozoide se realiza mediante la observación del embriólogo, que observa en la muestra de semen a un espermatozoide con una buena movilidad y lo selecciona para realizar la fecundación.

Indicaciones

El PICSI es una técnica bastante novedosa, por lo que aún se estudia a qué pacientes se debe indicar, pero de una forma general su utilización se da en casos de:

  • Pacientes con alto nivel de fragmentación de ADN en sus espermatozoides.
  • Parejas que llevan tiempo intentando ser padres con ciclos fallidos de fecundación in vitro.
  • Previo fallo de ICSI por una baja calidad de los embriones.
  • Casos de aborto de repetición que se sospecha que la causa es masculina, o de causa desconocida.
  • Cuando la calidad del semen es baja.

Proceso

El PICSI es el mismo procedimiento que el ICSI salvo por la selección del espermatozoide.
La recogida de semen se realiza de forma normal, y tras la captación de los espermatozoides se utiliza una placa especial para depositarlos.
En el PICSI se utiliza un cultivo de gel rico en ácido hialurónico, en el cual se introducirá la muestra de semen. Este cultivo producirá cambios en la movilidad del esperma. La movilidad y morfología serán las características que permitan saber cuáles son los espermatozoides más preparados para llevar a cabo la fertilización del ovulo.
Una vez seleccionado el espermatozoide se aspira con la pipeta de microinyección y se realiza el ICSI de forma normal.

Ventajas

El PICSI es muy útil en los casos de pacientes que tienen una buena movilidad de los espermatozoides, con una alta fragmentación de ADN, porque ayudan a elegir el espermatozoide maduro y de buena calidad.
Estos espermatozoides se seleccionan de forma individual y presentan bajas tasas de fragmentación, disminuyendo la posibilidad que existan alteraciones genéticas.
De forma que la posibilidad de que se formen embriones de buena calidad es mayor, haciendo que también aumenten las tasas de embarazo.

El PICSI no solo favorece la fecundación, sino que también reduce las probabilidades de aborto.